No tengo comisión con Ikea, aunque honestamente creo que me la merezco. Cuando los amigos me consultan algo de decoración se sonríen cuando comprueban que me conozco hasta el nombre de los productos. Me gusta estar al loro de todo lo que reciben y disfruto de su showroom, de sus catálogos y de las demostraciones que hacen, en ocasiones, a primera hora de la mañana para un reducido número de clientes.
Cuando a veces me comentan que tal o cual mueble no es de calidad, siempre contesto que me da igual por varias razones: su precio, van a "vivir" más que yo, no permanecerán para otras generaciones (en ocasiones es un estorbo cargar con muebles que compraron otros a su gusto), son alegres, prácticos...
En resumen: me hubiera gustado ser diseñadora de Ikea.
Paseando por la red he visto estas fotos de una pequeña cocina. Creo que podrás aprovechar alguna idea y por eso te la traigo hoy.
No te pierdas el link del vídeo que te pongo al final, donde la interiorista aclara algún detalle de la cocina.
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